viernes, 15 de octubre de 2010

Mundo Maravilloso

 Corresponde a un mundo ficticio en el cual todos los hechos están fuera de las leyes lógicas de nuestra realidad. Se caracteriza por la presencia de seres mágicos (hadas, duendes, brujas, ogros, dragones…), hechos ilógicos que son naturales o normales sólo dentro de ese mundo. Nada de lo que allí sucede se pretende explicar; se asume que es cierto. Este mundo aparece en los cuentos folclóricos y tradicionales, ejemplo: La Cenicienta, Blancanieves, Hansel y Gretel, entre otros.


La cenicienta 
(Charles Perrault)
"Había una vez un gentilhombre que se casó en segundas nupcias con una mujer, la más altanera y orgullosa que jamás se haya visto. Tenía dos hijas por el estilo y que se le parecían en todo. El marido, por su lado, tenía una hija, pero de una dulzura y bondad sin par; lo había heredado de su madre que era la mejor persona del mundo.
Junto con realizarse la boda, la madrasta dio libre curso a su mal carácter; no pudo soportar las cualidades de la joven, que hacían parecer todavía más odiables a sus hijas. La obligó a las más viles tareas de la casa: ella era la que fregaba los pisos y la vajilla, la que limpiaba los cuartos de la señora y de las señoritas sus hijas; dormía en lo más alto de la casa, en una buhardilla, sobre una mísera palloza, mientras sus hermanas ocupaban habitaciones con parqué, donde tenían camas a la última moda y espejos en los que podían mirarse de cuerpo entero.
La pobre muchacha aguantaba todo con paciencia, y no se atrevía a quejarse ante su padre por miedo a que la reprendiera, pues su mujer lo dominaba por completo. Cuando terminaba sus quehaceres, se instalaba en el rincón de la chimenea, sentándose sobre las cenizas, lo que le había merecido el apodo de Culocenizón. La menor, que no era tan mala como la mayor, la llamaba Cenicienta; sin embargo Cenicienta, con sus míseras ropas, no dejaba de ser cien veces más hermosa que sus hermanas que andaban tan ricamente vestidas."




Biografía de Charles Perrault
Nació el 12 de enero de 1628 en la ciudad de París, mediante un parto doble, en el que también vino al mundo su gemelo Francois. Su familia perteneciente a la burguesía acomodada, hizo posible que tuviera una buena infancia y concurriera a las mejores escuelas de la época. Ingresó en el colegio de Beauvais en 1637, donde descubre su facilidad para las lenguas muertas. A partir de 1643, comienza a estudiar derecho. Indudablemente hábil y con un notorio sentido práctico, recibe la protección de su hermano mayor Pierre quien esRecaudador General. En 1654 es nombrado funcionario para trabajar en el servicio gubernamental. Tomó parte en la creación de la Academia de las Ciencias y en la restauración de la Academia de Pintura. Jamás luchó contra el sistema, lo cual le facilitó la supervivencia en una Francia muy convulsionada políticamente y en la que los favoritos caían con demasiada frecuencia Su vida siempre dedicada al estudio, dejaba escaso margen a la fantasía. En su primer libro "Los muros de Troya", (1661), se muestra nada infantil, como se puede apreciar en el contenido de la obra. Esto se debe a que a lo largo de su burocrática y aburrida existencia de funcionario privilegiado, lo que más escribió fueron odas, discursos, diálogos, poemas, y obras que halagaban al rey y a los príncipes, lo que le valió llevar una vida colmada de honores, que él supo aprovechar. Fue secretario de la Academia Francesa desde 1663, convirtiéndose en el protegido de Colbert, el famoso consejero de Luis XIV, hasta que en 1665, progresa en su categoría laboral convertiéndose en el primero de los funcionarios reales, lo que le significa grandes prebendas. Hace extensiva su buena fortuna a sus familiares, consiguiendo, en 1667, que los planos con los que se construye el Observatorio del Rey, sean de su hermano Claude.
En 1671 es nombrado académico, y al año siguiente, contrae matrimonio con Marie Guichon, es elegido canciller de la Academia, y en 1673se convierte en Bibliotecario de la misma. Ese mismo año nace su primer hijo, una niña, y luego, en el intervalo que va desde 1675 a 1678, le nacen tres hijos más y su esposa fallece después del nacimiento del último. En 1680, Perrault tiene que ceder su puesto privilegiado de primer funcionario al hijo de Colbert. A estos sinsabores vienen a añadirse más tarde otros de carácter literario - erudito, como la célebre controversia que lo distancia de Boileau, a propósito de una divergencia de opiniones que se traducen en su obra crítica: "Paralelo de los Ancianos y de los Modernos" en el que se contemplan las Artes y las Ciencias. En 1687 escribió el poema El siglo de Luis el Grande y en1688 Comparación entre antiguos y modernos , un alegato en favor de los escritores "modernos" y en contra de los tradicionalistas. El ilustre autor escribió un total de 46 obras, ocho de ellas publicadas póstumamente, entre las que se halla Memorias de mi vida. A excepción de los cuentos infantiles, toda su obra se compone mayoritariamente, en loas al rey de Francia. A los 55 años escribió "Historias o Cuentos del pasado", más conocido como "Los cuentos de la mamá Gansa" (por la imagen que ilustraba su tapa) - publicados en 1697-en donde se encuentran la mayoría de sus cuentos más famosos. Son éstos y no otros los que han logrado vencer al tiempo llegando hasta nosotros con la misma frescura y espontaneidad conque fueron escritos, después de recopilados de la tradición oral o de leyendas de exótico origen. Se trata de cuentos morales, indudablemente, pero llenos de un encanto que perdura y que los ha convertido en las lecturas favoritas de los niños. Los personajes que emplea son hadas, ogros, animales que hablan, brujas y príncipes encantados, entre otros. Al final de cada relato, el autor incluye una moraleja referente al contenido de cada historia. El escritor registró las costumbres de una época en el que la mayoría estaba inconforme con su situación, y para dar esperanzas a la gente en un período histórico, por lo regular incluía finales felices en sus escritos.

200 almas selladas en un Elfo (Gerardo Roldán)




En un mundo paralelo a la tierra se libraba una batalla interminable entre dragones, centauros, y elfos. En el campo de batalla un par de elfos resaltaba del resto que morían cuando los centauros y dragones ejecutaban su impacto de espadones y bolas de fuego. Padre Katsu y su valeroso hijo Hirochi sobrevivían entre una multitud  de centauros insaciables de sangre, codo a codo peleaban por dejar vivir al otro derribando así uno tras otro centauro. El cansancio y la edad le estaban pasando la cuenta a Katsu que por mucho que quería recuperar sus anhelados años de juventud no podía, mientras recuperaba el aliento, su hijo con la misma gallardía que al comienzo de la batalla mataba a sus primeros centauros, seguía y seguía sin sentir cansancio alguno. Repentinamente y sin previo aviso Katsu recibe una estocada que venia desde el cielo oscuro y tenebroso que a los pocos segundos cae arrodillado sintiendo por ultima vez el desgano de una derrota.
El hijo inocentemente sigue matando centauros pensando que su padre le protegía las espaldas. En una de esas miradas donde hace un giro para pegarle en las rodillas a los centauros, ve a su padre tirado en el suelo, su pecho se contrae provocando la costosa respiración, lentamente baja la guardia y camina lentamente hacia el cadáver, al llegar cae arrodillado creándose una leve herida en estás. Toma cuidadosamente la cabeza del padre, los ojos llorosos del Hirochi dejan caer una solitaria lágrima que toca los labios de Katsu reanimándolo para que este dijera sus últimas palabras.
El padre abre los ojos dificultosamente y dice en un pequeño susurro:
-Hijo, te amo
Mientras los ojos del padre se serraban lentamente, caen dos lágrimas que acompañan un grito desgarrador del hijo. Un silencio profundo se forma durante unos segundos, donde lo único que se siente es la dificultad del hijo para pararse, toma su espada y al envolverla en fuego sigue la pelea deseando este la venganza. Mata uno tras otro sin piedad, la ira de este combinada con los sentimientos hacen temblar a cualquier enemigo que se le presente. Los centauros aterrorizados por el avance mandan a sus mejores aliados. Del cielo cubierto de nubes negras se asoma una cabeza de dragón seguidas por miles de estas.
El pobre elfo mira hacia el cielo visualizando a los dragones, se arma de valor, cortando una pata de un centauro y antes de clavarle la espada en el pacho dice:
-¡nos vemos en el Infierno!
La espada atraviesa perfectamente el duro corazón del centauro. Hirochi se agacha tocando el piso con la mano izquierda y da un enorme salto dirigiéndose al dragón líder de la tropa, intenta atravesarle el cuello con su espada pero se encuentra con la dura y escamosa piel del dragón haciendo que fuese imposible perforarla, Hirochi se aferra de una escama que sobresalía del cuello, desvía su vista al pecho del dragón descubriendo una pequeña escama brillante.
El dragón intentando matar al elfo que colgado de su cuello amenaza con matarlo, para evitar el fatal desenlace contrae las alas cayendo en picada. El elfo a pocos metros del suelo se suelta provocando que el dragón, al contacto con el suelo, explotara, matando a todo el que se encontrara en un kilómetro de radio, El elfo cae fuertemente en la tierra haciendo que esta se hundiera unos centímetros. Al no ver a nadie vivo clava su espada al costado y se sienta para descansar.
Mientras el humo se disipa se empieza a visualizar borrosamente una silueta que camina lentamente apoyado de una rama larga que lo sobrepasaba por unos centímetros. Hirochi se levanta, toma su espada, la envuelve en fuego y sale corriendo velozmente a encontrarse con la silueta. A los pocos metros se da cuenta de que es un anciano, pero sin importarle esto le lanza una estocada. El anciano frena y da un pequeño golpe con el bastón en el suelo. Una fuerza hace retroceder tres metros al elfo. Hirochi utiliza su velocidad desapareciendo de la vista del anciano y aparece detrás de él. El anciano se da vuelta y lo apunta con el bastón.
-¡ÁLAK!-grita el anciano
Un viento fuerte derriba a Hirochi provocándole un asombro inesperado.
El viejo lo apunta nuevamente y grita a los cuatro vientos:
-¡L ndaka dar!
El cielo se envuelve en unas nubes de color verde oscuro. Saliendo un rayo que impacta en la cabeza del elfo.
De apoco Hirochi empieza a perder la conciencia pero mientras la perdía escucha al viejo:
-Los muertos te seguirán y maran hasta que tú termines la guerra que empezaste.
La cabeza de Hirochi pega fuertemente en el suelo provocando la inconsciencia.

Autor: Gerardo Roldan 

No hay comentarios:

Publicar un comentario